La santafesina Evelin Bermúdez es la mejor boxeadora de la República Argentina. Su corona de campeona mundial minimosca (FIB y OMB), con la que se tutea desde 2018, le da aún el respaldo suficiente para justificar tal condición, incluso soportando la estampida y el ascenso de la catamarqueña Nazarena Romero, campeona mundial de los supergallos (CMB), quien capturó los mejores elogios y las máximas distinciones en 2024.
Este sábado, Bermúdez, de 28 años y con una admirable carrera de 20 victorias (7 KO) y sólo un revés ante la costarricense Yokasta Valle, en fallo localista, tendrá aquello que todo deportista necesita para afirmar la supremacía sobre sus competidores: una pelea popular, un escenario histórico y una desafiante con estirpe. La suma de estos tres factores constituye la fórmula ideal para gestar una pelea con consecuencias de “sube y baja” en la bolsa de valores de cada pugilista. Imprescindible en estos días.
Bermúdez defenderá su cetro en el Estadio Municipal de San Lorenzo, Santa Fe, a quince minutos del histórico predio donde se libró la batalla más sentida de nuestra independencia, en 1813; detalle pasional y atractivo que elevará el calibre de este clásico inaugurado en 1954: Argentina vs Japón.
¿Quién es la retadora? Tenaki Tsunami, emblema del boxeo femenino nipón. A los 40 años y con dos cetros mundiales conquistados (mininosca OMB y supermosca AMB), buscará cristalizar su última gran oportunidad. Combatió con las mejores: Seniesa Estrada, Mariana Juárez y Jésica Chávez, y pese a perder con ellas, su espíritu combativo recibió los mejores elogios. Es el último tiempo de una carrera con 32 victorias (19 KO) y 13 reveses.
Sólo tres boxeadoras profesionales: la jamaiquina Alicia Ashley, la mexicana Jackie Nava y la puertorriqueña Amanda Serrano la superan en jerarquía en torno a las mejores extranjeras que boxearon en nuestro país. Y esto habla de su nivel.
Este combate, que televisará TyC Sports a la medianoche, logró un reconocimiento total. Curioso; casi al mismo tiempo se oficializó la tercera contienda entre la irlandesa Katie Taylor y Amanda Serrano, el 11 de julio próximo, en el Madison Square Garden de Nueva York. Y todo esto potencia el presente del boxeo de guantes rosas.
Evelin y las vueltas de la vida
Bermúdez demostró mucha templanza mas allá de sus cualidades sobre el ring. Su vida arrastró momentos de sacrificados y lucimientos. Del cartoneo familiar por las calles de Villa Gobernador Galvez hasta la caminata en alguna pasarela de modelos en Rosario, cautivando aplausos con su sonrisa angelada que la convirtió en La Princesita en el mundo deportivo. Nada le fue fácil.
De familia de boxeadores. Seria y de pocas palabras, nunca entró en litigios ni conventillos. Su hermana Daniela fue campeona del mundo, con batallas durísimas ante Marcela Acuña y Amanda Serrano, entre tantas. Con su papá, Tito, como maestro y entrenador principal, mostró evolución en cada una de sus defensas. Tiene experiencia y tiene mundo. Boxeadora de línea, afrontará una pelea como a los argentinos les gusta: clásica y popular a la vez.
El último sábado, el invicto campeón Gervonta Davis fracasó en todos los aspectos que podrían eyectarlo a un cuadro de honor para estar entre los mejores. No hizo lo que debía y desapareció del sistema en un instante. Lejos de lo soñado. Bermúdez sabe lo que tiene que hacer para seguir en lo más alto. Nunca decepcionó y tiene su gran chance. No es menos que ninguna y ya lo demostró.